Hace justo dos años que me embarqué en la aventura de crear este espacio, tenía ilusión, ganas y mucho miedo por no saber cuánto duraría la aventura. Después de 165 bebés puedo decir orgulloso que cada día que pasa tengo aún más y vosotros, los que me veis y sentís al otro lado sois parte de esto (más bien, sois esto)
Y es por eso que tras un temporal como el vivido estos días atrás vengo a reflexionar sobre algo importante: ¿Cuántas cosas que teníais hace dos años las tenéis ahora? ¿Cuántas personas siguen, se han ido o han aparecido en tu vida? Es importante saber cuanto cambiamos a cada instante pero es más importante ser cada día una versión mejorada de nosotros mismos. Somos humanos y como tal, fallamos pero si conseguimos visualizar siempre una salida posible conseguiremos dejar atrás cualquier racha negativa por muy fuerte y larga que sea.
La vida es tan fugaz como una estrella y no, no os voy a volver a hablar del "Qui non ci ferma" que llevo tatuado en el corazón, pero es que al igual que una estrella que vemos brillar hace tiempo que se apagó... ¿Por qué nos empeñamos en brillar cuando estamos apagados? No todo debería ser post en Instagram, tuits con segundas intenciones o conversaciones eternas a las que no respondemos por orgullo. Existen personas que nos intentan anular, existen personas que nos iluminan el camino y también existen momentos para todo. Disfruta, pero solo cuando lo sientas de verdad. Llora cuando quieras que nadie te puede juzgar y si lo hace sólo demuestra la calidad (y calidez) humana que atesora.
No sé que tendré dentro de otros 750 días de vida, ni siquiera sé dónde estaré ni que persona seré. Lo que ahora soy y tengo es lo que realmente me vale. ¿Para qué más?
Mañana no existe
Comentarios
Publicar un comentario