Después de un fin de semana fuera de casa vuelvo a la rutina con un sabor agridulce: por un lado los recuerdos se amontonan, y eso que sólo fueron tres días, (imaginaros un año) y por el otro las ganas irrefutables de haber alargado todo lo posible el tiempo allí. Siempre he pensado (cómo casi todos) que debemos llamar hogar al lugar donde vivimos pero
en los últimos tiempos he decidido llamar como tal a todo aquel lugar donde nos sentimos como en casa.
Tenemos la conciencia social de vivir en familia, vivir con amigos o en pareja, pero no de vivir solos. ¿Pensáis que tenemos miedo a la soledad? ¿Sientes qué si lo haces puedes quedarte solo?. En cuánto al lugar físico, todos tenemos apego al lugar de nacimiento sea más o menos pero también en su mayoría de casos es por lo que tenemos allí. Si pudiéramos transportar todo lo que tenemos a una ciudad distinta... ¿Lo haríamos?
En definitiva lo que vengo a reflexionaros es que no tenemos una "casa", tenemos tantos hogares así como nos sintamos en ellos. ¿Y la familia? ¿Cuántas "familias" tenéis?
!Sentirse como en casa en cualquier parte del mundo es hacer del mundo tu casa!
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