Ponemos fin a tres días de mucho movimiento, se acaba un fin de semana de carnaval en el que entre canciones y disfraces se me viene a la cabeza una reflexión.
No puedo ni enumerar la de veces que hemos dejado de intentar algo que nos hacía ilusión o que nos gustaba por pensar que no íbamos a llegar a ningún lado o que estábamos perdiendo el tiempo. Evidentemente, dejábamos atrás ganas, ilusión y felicidad para darle importancia al miedo, la vergüenza y la responsabilidad... ¿De verdad crees que has hecho bien? ¿De verdad preferimos una palmadita en la espalda que una sonrisa en la cara?
Está muy de moda Operación Triunfo y sólo os quiero poner de ejemplo a los concursantes de este show televisivo porque a base de trabajo y trabajo han conseguido llevar su talento (todos tenemos el nuestro) hasta su máxima expresión, van caminando con paso firme a la felicidad absoluta que supone dedicar su vida entera a lo que les hace felices.
Llegarán problemas, nos preguntaremos mil veces si hemos hecho bien eligiendo esta carrera o este trabajo, nos llegará el miedo por si lo que hacemos no se nos da bien. Igual deberíamos pensar algo más en qué cuando hacemos algo con ilusión y ganas nos sale diez veces mejor y que cuando nos rodeamos de gente con la que compartimos las mismas ganas ya... ¡No hay quien pare esto!
Creedme cuando os digo que no sirve de nada ser el mejor fotógrafo del mundo si no te gusta hacer fotos... ¿Te hace feliz bailar o cantar? Mañana ya es tarde para que empieces a hacerlo
¿Sabes? La felicidad es como un avión, siempre puedes llegar a ella, pero sólo si te atreves a ir llegarás a tu destino.
Muy fan de la referencia a Operación Triunfo jajajajaja. Muy guay el mensaje 👏
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